Tuesday, April 26, 2005

Let's Get Lost

Me gusta escuchar a Chet Baker, aquel trompetista apodado el "James Dean" del jazz. Traté de encontrar otra voz masculina en este estilo (porque en el rock está Jeff Buckley), pero buscando en lo nuevo y popular aparecen discos como el de Jaime Cullum (Twentysomething) y Michael Bublé (It’s Time) y, aunque suenan bien son demasiado estudiados. Prefiero volver atrás. Y no me refiero a los manoseados Miles Davis o Frank Sinatra, sino a alguien que no pretendía parecer un genio o demostrar tener la mejor voz del planeta. Tampoco creo ser un conocedor en este estilo, pero cuando una canción logra captar toda tu atención es un buen comienzo. La primera vez que escuché a Baker fue con una canción llamada “Let’s Get Lost” (también nombre de un documental sobre su vida dirigido por Bruce Weber) que no es deprimente, sino una invitación a romper reglas, supe que debía tener alguno de sus discos. Hay que dejar en claro que los “standards”, o covers, son interpretados por mucha gente, pero cada quien entrega lo suyo y ahí está la diferencia.
Luego quise saber de su vida. Su popularidad comenzó a crecer a principios de la década del 50. Cuando tenía 23 años, junto a Gerry Mulligan, eran tema obligado en los aficionados al jazz, hasta para saber que tipo de zapatos usar. Fue llamado el “Rey del Cool” movimiento de la Costa Oeste al que nunca reconoció pertenecer. No estaba lejano a escándalos, muchas mujeres y lo que más marcó su vida: las drogas. Algo de aquello expone en “Como si tuviera alas”(Edit. Mondadori), un libro… en realidad una recopilación de memorias - por lo demás muy pocas - en donde cuenta las veces que estuvo en la cárcel, las mujeres que querían tranquilizarlo y la gran cantidad de drogas que consumía. Afuera quedaba su largo auto exilio de la música y su vida e Europa. Ahora aparece otro libro “Deep in a Dream: La larga noche de Chet Baker” (James Gavin – The New York Times), una biografía de este “rebelde” del jazz que se convirtió en un mito cuando en el año 1988, en Amsterdam, apareció muerto en la calle, por un supuesto suicidio al caer por la ventana de su habitación y por lo que pasó a la lista de los malditos de la música. Un tipo que tuvo calificativos de sexy, angelical, misterioso, melancólico, que fue admirado por hombres y mujeres, y que toda su vida tuvo que pelear por el reconocimiento, ya que su especie de ambigüedad, sumada a ser catalogado como “bello” opacaba su puesto como uno de los mejores trompetistas de la historia. Por eso hoy músicos de diferentes estilos reconocen en el una influencia que se nota en algunos discos: Nina Person, Jay Jay Johanson, Patrick Wolf, Tim Hutton, Kathleen Edwards, Ed Harcourt, Goldfrapp y hasta nacionales como Cristian Cuturrufo. Una importante es Bjork que en una entrevista dijo Diría que Baker es mi vocalista preferido del siglo. Es el único cantante con el que me he podido identificar. Me encanta el hecho de que sea tan expresivo, emocional por demás. Es material clásico; me afloja las rodillas”. Es más “Like Someone in Love” de su primer disco viene de la versión del mismo tema interpretado por Baker. Lo mejor es hacer la prueba de escuchar canciones como ”My Funny Valentine”, “You Don't Know What Love Is” o “Come Rain Or Come Shine” para conocer el resultado. Creo que es irresistible e inquietante escuchar a alguien que logró que su música posea la tranquilidad que su vida nunca llegó a tener.

8 comments:

Hijo Tonto said...

Buen post gieb, muy bueno.

Reconozco que a Baker algo de mania le tengo como trompetista, pero como crooner comparte un raro segundo lugar junto a Johnny Hartman.

Si tiene tiempo, ganas y disposicion me atrevo a recomendarle tres trompetistas: Tomasz Stanko, Enrico Rava y Dave Douglas. ¿Discos? Litania, un tributo a Komeda (compositor de OST para Polanski), Easy Living y The Infinite, respectivamente.

Robert said...

ahhh, otro más de esos músicos que gustan tanto a las mínorias inteligentes...
cuándo hablarás de tu historia con el Axe?...

*no es necesario que cuentes lo del grupo de baile

Hamlet said...

música de pocos...la cuestiós es que te envuelva dentro de algo y que en algún momento dejes de estar por un rato gracias al placer de escuchar música o la voz de alguien...jijij
salu2
y sí vivo en un barrio rojo oculto, pero mi color no es ése precisamente!

Margarida V said...

hola

tengo que comprar un cd de baker y escuchar esa voz que tanto hablas, no soy muy de jazz pero me encanta jeff buckley por su profundidad y tristeza.
me gustaria poner tu link en mi blog, si te parece bien dime algo.
aguardo tu respuesta. :)

b said...

Creo que escuche algo de el en una pelicula
dan ganas de escucharlo al leerte

marze pac said...

esta bueno Baker, pero tengo que decir que yo y los instrumentos de viento no compartimos mucho, pero en él suenan bien.
y bublé me encanta... justo lo escucho en este momento, y estoy en la canción can´t buy me love -una exelente versión-

Anonymous said...

me gusta el disco de canciones solamente, la trompeta como que me aburre.
pero su voz es increible
saludos

Juano said...

Como eres lider de opinión y te hago caso - ya terminé Luna Park - dejé bajando en casa los grandes exitos del caballero este.

Slds