A veces hace tantas cosas que el resultado es igual a cero. Pasan los días así, ocupado, sin encontrarle sentido a la falta de sentido. Producir y acumular nunca le parece atractivo, aun cuando funciona de esa forma le encuentra más sabor al desprendimiento, a no tener donde afirmarse, y la opinión no cambia drásticamente cuando los días están desocupados y los bolsillos rotos. No se entiende, no entiende al resto. La mayoría de las veces flotan preguntas: ¿Qué? ¿Cómo? ¿Cuándo? ¿Dónde? ¿Por qué? ¿Quién? ¿Cuánto?
Todo esto suena a lata profunda, a disconformidad, pero no lo es, menos depresión o una crisis porque siempre pensó igual, desde que supo que había que salir a la calle, trabajar, comprar ropa y recibir un cheque por una labor que aunque suene de los mas cool (no le mientan al escritor), casi nunca es la deseada.
Es realista, es nada, es atravesar la ausencia. Cuando logra lo planeado no existe el alivio, las (auto) felicitaciones, el creerse el cuento completo, es por ello que aquel ego que los otros ven monumental no es más que una poco practicable idea.
Un pie le pide permiso al otro. En cada paso piensa que todas las personas en el metro, las micros, los autos y las carreteras concesionadas deben tener un motivo para seguir caminando ¿Y si no existe? ¿Queda funcionar? Alguien le dijo “acciona nuevamente el piloto automático, como antes”, peor ¿Dónde está el piloto? Se perdió, se pegó el sistema.
La mayoría de las veces pierde la concentración cuando quiere ser gestor, ordenar el equipo creativo que hay en su cabeza, pero otras ideas se acumulan esperando una salida, pero esto no es una salida… hay que recordarlo. ¿Qué le pasa? Nada… una linda respuesta. Por eso hay que abrir un libro, escuchar una canción o ver una película para tratar de encontrar algo sensato, un pensamiento filmado por otro, cantado por otro o escrito por otro y así creer entender algo, porque entre nosotros (el resto) no pasa nada. O, por lo menos, no es importante tomarse la molestia si al final de cuentas hay que esperar el turno y seguir el ritmo de la misma canción que escuchan todos.
“Espero con impaciencia el día de mi encarcelamiento. Será entonces cuando mi vida, mi verdadera vida, dé comienzo.” (Elizabeth Bishop – Una Locura Cotidiana)
9 comments:
Es fregada esa sensación, porque no es por un rato, es un contínuo, un fantasma que regresa de vez en cuando, incluso aveces parece que no se va nunca.
"vivir atormentado de sentido, creo que esta, sí, esta es la parte más pesada"
Slds
y en este collage de frases pegadas, expuestas en tercera persona se lee una realidad que me parece muy cercana..
eso
-que foto más acertada, jaja-
abro acá y me encuentro a justamente quien iva a citar,
J el otro día escribi de eso, del limbo de trbajar en verano, del zumbido constante que se mantiene hasta las 6 y se transforma en luz, afuera, posibilidad de recreo pero que dura solo hasta acostarse para volver a zumbra mañana.
pa que trabajar, pa tener un suledo pa comprar ropa
me he dicho eso tb
y despues se cambia la ropa por las cuentas
y las cuentas por la guagua
y despues vivir pa trabajar
chu
mejor el 3 nos vimos
"nada ansío de nada/ mientras dura el instante de eternidad/ que es todo cuando no quiero nada"
Es como es. O mejor dicho, es lo que es. Ni mejor ni peor.
Me gustó la aclaración de no tratarse de disconformidad. Es como una temprana pero oportuna invitación a no sentir compasión por el personaje. Después de eso se hace más facil leerlo como una realista constatación de hechos, lo cual no quita que también pueda encontrarse la cuota precisa de subjetividad melancolica en frases como "no existe el alivio". Bonito.
Buena reflexion Mr. Gieb.
Atte.,
Saori
Crítica lieraria de post, comments, y otros.
wow, le citan a fito paez. o lo sintetizan...
hombre! qué hermoso!
pero yo lo leo melancólico y resacoso.
voy a tratar de leer esto no como otra queja nihilista barata del posmodernismo bloguero. eso, en base a las lecturas previas de textos suyos.
uno dice y escribe cosas como esta cuando busca el sentido del sin sentido, pero sin ser lo suficientemente sincero como para decirse a uno mismo que lo esta haciendo. pareciera que el comun de los mortales tiene alguna clase de aversión a tratar de resolver seria y filosoficamente los problemas de sentido, y prefiere recurrir a referntes de mierda, como los poemas.
en mi mi opinion las cosas no "son como son". las cosas son, nada mas. y uno escoge lo que son. uno le inventa el sentido a la caminata rectiolinea de los hominidos en el metro, las veredas, o las micros. Saber eso en absoluto es imposible. si ni ellos lo saben. Uno esta perdido en un mundo inconmensurable. y eso, de por si, no significa nada, es uno el que escoge lo que significa, el que sea ridiculo, bonito, asqueante, salado, dulce, etc.
esa es mi reflexión existencialista simplificada, que, espero, no haya sonado a manual de autoayuda. aunque, en realidad, la unica manera en que no puede sonar como eso, es que meta palabritas propias de la jerga snobista de la ontologia.
Saludos.
Creo que esto es mas un ejercicio literario que una queja nihilista
¿me equivoco gieb?
Laucha ¿eres estudiante de filosofía?
Se nota
Suerte
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