A House is Not a Home

Posted by Hello

Acabo de enterarme que es el día de los “enamorados”. Y luego de un fin de semana en Viña escuchando un disco que exuda corazones, me pregunto ¿Existe la música “romántica” para quienes no están enamorados? El ejercicio más valiente en ese caso es escuchar a una pareja de enamorados, y no hablo de los dúos al estilo kitsch de Pimpinela o de los que hablan de lugares comunes (que abundan), sino de algo más elevado, a different class of romantic music. Al igual que Serge Gainsbourg con Jane Birkin en los sesenta, ahora Benjamín Biolay y su esposa, Chiara Mastroianni (comentario obligado: hija de Catherine Deneuve y Marcelo Mastroianni), quisieron hacer la misma hazaña facturando “Home”(2004) un disco que no muestra nada nuevo pero que se deja escuchar y nos hace extasiar gracias a sus voces, profunda en el caso de él y suave en el de ella. Una experiencia erótica y dulce creada por estos compañeros de sábanas. Si bien muchos creían que Biolay no saldría del estigma de crooner que generó su primer disco “Rose Kennedy”(2002), salió airoso y logró mostrarse “moderno” en “Negatif”(2003) en el que comenzó el coqueteo de las colaboraciones con su mujer, que no tardaron en dar frutos en este trabajo con letras en inglés y francés. El zumbido de una mosca es una extraña opertura antes de comenzar a recorrer este hogar. Biolay figura como compositor en 12 canciones y Mastroianni en tres, entre las que destacan “Quelque part on m’attend”, “Dance Rock’n Roll” y “La Plage”. Un disco definido por ellos como “de viaje”, ya que la creación fue durante unas pequeñas vacaciones. Toda una road movie para quienes se quieran imaginar el desbordante amor y belleza de estos dos seres. Cosa que da un poco de pudor. Un álbum calmado, extenso, con tintes folk, algunos adornos electrónicos y para azucarar un poco están los vientos, los punteos de guitarra y teclados. Las voces se encargan de susurrarnos frases sugerentes para transformarnos en voyeristas interesados en descubrir más intimidad de la que muestran. Lamentablemente el zumbido de la mosca se repite y volvemos al mundo real. Mejor pensar que no son más que un hombre y una mujer.

Web de Benjamin Biolay