La Dudosa Estética de Glazer

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Una historia retorcida sin mostrar nada que cruce el límite de lo bueno o malo, cual sea su significado. ¿”Birth” (traducida como Reencarnación) es suspenso? La segunda película de Jonathan Glazer prometía una cosa antes de verla y es otra completamente diferente al terminar su metraje. Inclusive durante. Pasa regularmente con este director, al parecer es su fin desde los videos musicales que dirigió. Siempre miente. Es imperfecto. Deja preguntas volando. Jonathan Glazer es inglés, comenzó con videos musicales, nada menos que para Radiohead (Karma Police), UNKLE (Rabbit in your Headlights), Blur (Universal), Richard Aschcroft (Songs for Lovers), Nick Cave (Into My Arms) y Massive Attack (Karmacoma) entre otros, además de avisos publicitarios para Levi’s y Guinnes. Material que se incluirá en un próximo dvd de la serie “The Work of Director”, que ya editó a Spike Jonze (Being John Malkovich) y Michel Gondry (Eternal Sunshine of the Spootles Mind), que obviamente pasaron del clip al cine. También Chris Cunningham que, espero, pase al cine después del cortometraje del mutante “Rubber Johnny”. En el 2000 Glazer tuvo su debut en la pantalla grande con “Sexy Beast”, una historia de humor negro sobre gangsters con nominaciones a los Globos de Oro, Oscar y Bafta, incluido Ben Kingsley (Gandhi) a mejor actor, y ganadora de mejor película independiente y mejor director en el British Independet Film Awards del 2001. Todo esto para decir que el futuro se veía iluminado y perfecto, hasta hoy en que hay dos bandos, unos de los aplauden y otros no le creen nada. Lo cierto es que durante el trayecto se ganó el apodo de "la respuesta inglesa a David Fincher". Siempre la categoría pesa. Admirador de Buñuel y Kubrick. Se nota. Comparado con Bergman en esta película. Suena a mucho. A veces es más un alumno de uno que otro. Cine de personajes o sólo estética, da lo mismo, funciona. Logra una diferencia con el cine comercial del cual es parte. Argumentos perversos sin escenas perversas, una película restringida a menores por una seudo pederastia que no existe: mujer en la tina de baño con un pre-adolescente, beso cuestionador, un plan imperfecto. Detalles, frialdad, algo se esconde bajo la perfección de la clase acomodada. El viento en la frente de la protagonista al recibir una carta, muchos pasillos, nieve y árboles. Su rostro lleno de dudas por más de un minuto en pantalla, eterno, no tiene nada claro. La mujer dependiente, que se arrodilla ante un hombre. Esa necesidad de tener algo en que aferrarse.

Anna (Nicole Kidman), luego de cumplirse 10 años de la muerte de su esposo le da el sí a su novio de tres años, pero llega un niño de 10 años (Cameron Bright) a decirle que diga no al matrimonio, que cometerá un error, que él es su marido y es más, se llama igual: Sean. La seguridad la hace confiar. Una historia indirectamente provocativa que podría haber sido grosera y efectiva, pero no lo es. Acá se camina por la otra vereda. Un guión sobrio, dirección de cámara, actores guiándose solos y la música de Alezandre Desplat que acompaña de verdad, nunca es adorno. La fotografía del Upper East Side en New York, del Central Park y del edificio elegante es de Harris Savides ("Elephant" de Gus Van Sant) que transforma todo en un lugar inventado y claustrofóbico, sin mucha vida. Jean Claude Carriére (guionista de Buñuel en "La Vía Lactea") fue llamado para hacer su trabajo sin contemplar bases morales, ayudado por Milo Addica (guionista de "Monster’s Ball" de Marc Forster) y lograr armar esta historia de obsesiones contenidas. Glazer seduce con sugerentes movimientos de cámara, con ambiguos rostros, con seguimientos interminables. Fría, cínica ¿qué más? hace que lo perturbador no perturbe, que quienes mandaron a rezar a los que verían la cinta se quedaran callados, a los que nombraron como pedófila a la Kidman quedarán con la duda. Además podemos ver a Lauren Bacall (Dogville), Cara Seymour (American Psycho), Anne Hache (Nación Prozac) en el cast, mujeres que dejan dudas, en realidad todo parece más dudoso de lo que es. Eso, todo es un cuestionamiento de hasta dónde llegaríamos si alguien nos cuenta el cuento que queremos escuchar. Y por sobre todo, una historia simple con respuestas difìciles para mentes que quieran enredarse. Arriesgado querer hacer una película como esta ¿recomendable? Depende, si te gusta ver algo que pudo ser más pero que no está mal, si te gusta el poder de las imágenes y los filmes que quieren ser valientes. No, definitivamente, si quieres ver otra "Sexto Sentido" o "Los Otros". Por ahí no va. A esperar la tercera cinta de Glazer, ya titulada “Chaos” con Robert de Niro. Está a prueba.

Birth Web

Para los que ni siquiera se dieron cuenta de su estreno en las salas de cine, o fueron y ya no estaba, ahora está disponible para arriendo y venta.